Lo reconozco, soy muy fan del minimalismo, de quienes a
partir de cosas pequeñas, ideas sencillas, son capaces de crear algo muy grande, algo
que emocione. A partir de esto os podéis imaginar mi total devoción por estos
chicos que se hacen llamar The XX y que hace unas semanas estrenaron su segundo
álbum: Coexist.
Cuando en 2009 estrenaron su álbum debut, mi hermano, un
buen enfermo de la música, me recomendó con un entusiasmo que pocas veces
muestra con alguna banda que lo escuchara. Rápidamente entendí el por qué. The
XX hacían gala de un sonido que al menos yo nunca había escuchado; un sonido
pequeñito, sencillo, pero que funcionaba, que transmitía. Y de qué manera.
Hoy, tres años después, el factor sorpresa se ha disipado,
pero sigue quedando un innegable talento. Coexist continúa el trazo iniciado en
el disco de debut (¿quién esperaba lo contrario?), haciendo del silencio un
aliado, susurrándonos canciones al oído, con punteos de guitarras cuyo eco
resuena a lo largo y ancho del disco. En definitiva las señas de identidad que
estos chicos de Londres han conseguido apropiarse ya desde su primer trabajo.
Entrando en materia abrimos el disco con Angels. La dulce
voz de Romy Madley cabalga junto a una guitarra salida de las profundidades de
una caverna para emocionarnos desde la primera escucha. La suavidad con que
transcurre la canción es interrumpida por la percusión con que Jamie Smith se
encarga de acuchillar el tema.
Try es uno de los temazos del disco, con ese agudo sonido
que va recorriendo toda la canción y que parece emerger de la casa más
terrorífica. El mismo Iker Jímenez, por qué no decirlo, podría utilizarlo para
sonorizar uno de sus relatos de misterio. Un sonido que me gusta y me disgusta
a partes iguales, pero que a la vez es adictivo y hace que el tema sobresalga del
resto.
Unfold muestra desde mi punto de vista esa madurez que estos jovencísimos chicos van adquiriendo a la hora de hacer canciones. El uso de los silencios y la capacidad para componer una gran canción sin estridencias, con un punteo de guitarra sencillo pero muy hermoso, que podrían haber firmado los mismísimos Sigur Ros.
Aquí lo dejamos por ahora, dentro de un par de semanas os seguiré contando que sensaciones me deja este Coexist pero eso sí, en directo, ya que The XX visitará, como ya hizo Bon Iver hace una semana, la
capital para realizar dos conciertos en La Riviera: martes 13 y miércoles 14 de
Noviembre. Sin duda dos grandes nombres del panorama musical actual y cuyas
carreras han seguido unos derroteros parecidos: ambos nos visitan con su
segundo disco bajo el brazo y en ambos casos tuvieron una acogida más fría que
su disco debut. Pero también me atrevería a pensar que ambos han conseguido
discos más maduros, con más capas, más complejos y por lo tanto no tan
accesibles a oídos poco entrenados. La diferencia entre ambos puede estar en el
directo. Bon Iver brindó un espectáculo memorable que fue todo un derroche de música, sin embargo, sabemos que para muchos ese es precisamente el punto flaco
de The XX, que en más de una ocasión ha dejado un sabor de boca agridulce en
nuestras tierras. No os preocupéis si os habéis quedado sin entrada porque
desde Apuesta Por El Rock And Roll os contaremos como fue el concierto y si The
XX respondió en directo a las expectativas creadas con Coexist.
No hay comentarios:
Publicar un comentario